Programa 267 *This PDF Document has Interactive links* 31 de agosto de 2023 Título: PARA TI Este mensaje es producido y está disponible gratuitamente en la página de Internet Laraizdelolivo.com Te presento un mensaje directo. Las cosas como son. Ya no queda tiempo que perder. Te hablaré a ti, personalmente. Hay algo mal en el mundo. Lo sabes, lo percibes, pero te han enseñado a creer que éste es el orden natural de las cosas. Sin embargo, el concepto de la vida y la muerte que la teoría de la evolución formula, es deprimente. Es una visión vacía de toda piedad y llena de violencia. Todo lo que ves a tu alrededor en muerte y destrucción. Dolor y enfermedad por doquier. La teoría de la evolución predica que, en la naturaleza, solo el más fuerte, y aquella especie que logre adaptarse a su entorno, solo esa especie sobrevivirá. Por ejemplo, un tigre caza en la selva por una presa más débil y acecha a las manadas para atacar al más joven, al débil, al que está rezagado, al que se separa de la manada. Lo sigue, lo domina y despedaza. Asi puede comer y llevar comida a sus crías. Si no tes has dado cuenta, asi es que funciona la humanidad. Una cadena alimenticia, donde existen dos categorías, la oveja y el lobo. Te pregunto, ¿Quién eres, la oveja o el lobo? Acuérdate que nuestro señor Jesus nos dijo que iban a tratar en el mundo. Leamos a Romanos 8:36 y dice así; “Por causa tuya estamos siempre expuestos a la muerte; nos tratan como ovejas llevadas al matadero” Si miras a tu alrededor y observas, la violencia te rodea de día y de noche. Es un mundo enloquecido, desquiciado, donde se admira al hombre fuerte violento y se ridiculizan a los débiles, de cuerpo y mente. La primera y la segunda guerra mundiales son un testimonio de esta condición humana de violencia. Yo he visto también esta conducta violenta dentro de la iglesia a través de los siglos. Es bochornoso. Es una corrupción de la palabra de Dios. Muchos cristianos usan el pasaje en Mateo 11:12 para justificar la violencia dentro de la historia de la iglesia. Y dice así: 12: Desde que Juan el Bautista comenzó a predicar hasta ahora, el reino de Dios avanza a pesar de sus enemigos. Sólo la gente valiente y decidida logra formar parte de él. Esta es la traducción en la Biblia TLA (Traducción en el lenguaje actual). Al leer este pasaje bíblico uno pensaría que El Reino de los Cielos es un sitio que para poder entrar hay que ser violento. Se infiere que ser violento es equivalente a ser valiente. Nada más lejos de la verdad. Es una traducción bíblica que te presenta al Reino de los Cielos como una extensión del mismo sistema de violencia que tenemos en el mundo. Es de notar que los editores de la traducción TLA, La organización mundial conocida como Sociedades Bíblicas Unidas; añadieron una nota al calce en la página de Mateo 11:12 de su Biblia para señalar que este pasaje bíblico es de difícil interpretación. Leamos la nota al calce: Footnotes: (TLA) Mateo 11:12 Otra posible traducción: Desde que Juan el Bautista comenzó a predicar hasta ahora, el reino de Dios ha sido atacado con furia por gente violenta que trata de destruirlo. Esta traducción es la más que se acerca al sentido correcto de leer este pasaje de Mateo 11:12. Los editores de la Biblia TLA pusieron la nota al calce, el “Footnote” para aclarar lo que ellos sabían es una mala y distorsionada traducción llamando valientes a los hombres violentos. Esta acción de parte de los editores de la Biblia TLA es una de integridad y de apercibimiento de la seriedad de traducir mal, de cambiar el significado de las palabras de nuestro Señor Jesús. Salvaron su vida. Para conocer a Nuestro Señor Jesús tenemos que estudiar el evangelio del Apóstol Pablo. Estudiar la palabra de Dios que fue revelada al apóstol directamente por Nuestro Señor Jesús para que fuera nuestro maestro y apóstol. El Apóstol para los gentiles, tú y yo. El Apóstol Pablo dio testimonio de esto en su defensa ante el gobernador romano Festo. Porque así está escrito en Hechos 26:12-18; 12 Ocupado en esto, iba yo a Damasco con poderes y en comisión de los principales sacerdotes, 13 cuando a mediodía, oh rey, yendo por el camino, vi una luz del cielo que sobrepasaba el resplandor del sol, la cual me rodeó a mí y a los que iban conmigo. 14 Y habiendo caído todos nosotros en tierra, oí una voz que me hablaba, y decía en lengua hebrea: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? Dura cosa te es dar coces contra el aguijón. 15 Yo entonces dije: ¿Quién eres, Señor? Y el Señor dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues. 16 Pero levántate, y ponte sobre tus pies; porque para esto he aparecido a ti, para ponerte por ministro y testigo de las cosas que has visto, y de aquellas en que me apareceré a ti, 17 librándote de tu pueblo, y de los gentiles, a quienes ahora te envío, 18 para que abras sus ojos, para que se conviertan de las tinieblas a la luz, y de la potestad de Satanás a Dios; para que reciban, por la fe que es en mí, perdón de pecados y herencia entre los santificados. Las epístolas del Apóstol Pablo son escritas según el conocimiento y entendimiento de las cosas guardadas desde el principio y que Nuestro Señor Jesús le reveló. Debemos leer todo lo que El Apóstol Pablo escribió para nosotros, los gentiles. Se que no te invité a un estudio exegético del capítulo 11 del libro de Mateo. Pero es necesario que veas la causa raíz de la violencia en el mundo en que vives. Cuando leas la Biblia, y te interesa un pasaje específico, antes de tomar el significado que los traductores y comentaristas infieren del verso, debes buscar el contexto que rodea a este pasaje. 1.Quien Habla 2.Quien Escribe 3.En qué fecha se escribió y a quien le está hablando el capítulo o la carta. Con este entorno tendrás las herramientas para dar con el sentido correcto de lo que estas leyendo. El contexto del pasaje de Mateo 11:12 son las palabras de Jesús como reacción a las noticias sobre el encarcelamiento de Juan el Bautista, es decir se dan en un contexto de violencia hacia el profeta. Jesús señala (profetiza) la violencia (βιάζεται, biádsetai) y a los violentos (βιαστα, biastai) que "arrebatan" (ρπάζουσιν ατήν, harpádsusin autón) como enemigos del Reino que intentan destruirlo. Jesús les habla en su tiempo, desde Juan, y profetiza hasta el presente, de ahí en adelante. La violencia de los judíos y gentiles contra el Reino había comenzado desde "los días de Juan el Bautista", contra el que se ejerció violencia pues fue encarcelado y posteriormente decapitado. En Mateo 13:19 se dice que "cuando alguno oye la Palabra del reino, viene el malo y arrebata [ρπάζει, harpádsei] lo que fue sembrado..." En ambos pasajes se usa el mismo verbo griego "harpadso", que se traduce correctamente como arrebatar o asaltar en contra de la voluntad de la víctima. Desde esta perspectiva, este pasaje no tiene nada que ver con la salvación del creyente o con su relación con el reino de Dios, sino con los enemigos que el Reino enfrenta y que afecta la vida de los que están en él. Considerando lo antes expuesto, una buena traducción del pasaje de Mateo 11:12 sería la versión Dios Habla Hoy (DHH), que lee así: "el reino de los cielos sufre violencia, y los que usan la fuerza pretenden acabar con él." El intentar interpretar este pasaje identificando como "violentos" a los creyentes, y que tienen que "arrebatar" (Asaltar) el reino de Dios choca contra el contexto del capítulo. Llama a lo malo bueno. Intenta hacernos ver positivamente la violencia en el reino. Es decir, si estás en una iglesia sentado en el banco, más vale que te levantes y te pongas violento y tomes por medio de tu fuerza la salvación. Tienes que arrebatar violentamente la salvación. Tomar por asalto el Reino de Dios y le hacerle violencia es una aberración, una conducta depravada y maliciosa de la salvación. Sencillamente no entienden porque Jesús derramó su sangre bendita, ni se han dado cuenta que la salvación es un regalo inmerecido. No hicimos nada para merecerla y no podemos hacer nada para obtenerla, excepto CREER. Fe y nada más. Leamos otra vez a Mateo 11:12 en la versión DHH; 12: Desde que vino Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los que usan la fuerza pretenden acabar con él. En este verso Nuestro Señor Jesús está refiriéndose a todos los que han intentado impedir que El Reino De los cielos se acercara a Jerusalén. Es decir, que se cumpliera la promesa del Padre Eterno Y Bueno hecha mil años antes al Rey David de que vendría el Mesías a reinar en Jerusalén. La promesa de que El Reino De Dios sería establecido en Israel para todos los descendientes de Abraham el patriarca. Cuando los Tres reyes Magos la anunciaron el nacimiento de Nuestro Señor Jesús, y temiendo el Rey Herodes el cumplimiento de esta profecía, mandó a matar a todo niño con menos de dos años en Belén. Pretendía matar a Jesús, para impedir el Reino de Dios en la tierra. La causa raíz de toda la violencia al reino de Dios es la siguiente: Todos los judíos en Jerusalén y posteriormente todos los gentiles en dondequiera que la Iglesia establecía un imperio y dominio sobre el pueblo, no querían perder el poder. La autoridad sobre las vidas de las ovejas, el dinero que eso les producía, y la influencia sobre los gobernantes. Y hasta el día de hoy, siguen pisoteando a las ovejas, alimentándose ellos con la gordura del carnero y dejando migajas a las ovejas. La Iglesia en general está desnutrida de la palabra de Dios. No es alimentada con alimento sólido, que es La Palabra sin adulterar de Dios. Desde Juan El Bautista hasta el día de hoy, han perseguido a la Iglesia. En el año 30 de nuestra era los líderes del sanedrín de Israel les exigieron a los romanos que crucificaran a Nuestro señor Jesús. Años más adelante los discípulos y los 12 apóstoles fueron dispersados por el mundo antiguo y ellos también fueron perseguidos por gentiles y masacrados por llevar el evangelio de Cristo dondequiera que iban. Siglos más tarde, los europeos cristianos masacraron a los indígenas de América Latina en la conquista española, “arrebatando” su oro y construido iglesias sobre sus templos paganos. Según ellos proclamaban, conquistaron el nuevo mundo para Dios y para sus reyes europeos. Otros europeos cristianos esclavizaron, “arrebataron” (Snatch Away) a miles de africanos para llevarlos al nuevo mundo como fuerza laboral barata, desechable, con la bendición de la iglesia europea. Siglos más tarde, en pleno siglo veinte mataron millones de judíos en el holocausto y el mundo guardó silencio en aparente indiferencia. Un hecho triste es un libro que publicó Martín Lutero siglos antes, titulado “Sobre los judíos y sus mentiras”. Un hombre de Dios llenando de odio la mente de los gentiles acerca de los judíos. Lutero fue un pilar de la iglesia protestante europea. Su libro influyó en el odio que los alemanes sentían hacia los judíos en la segunda guerra mundial. Otro pilar de la iglesia protestante europea fue Juan Calvino, quien hizo algo similar a lo que los judíos líderes del sanedrín hicieron con Jesús. Calvino tenía a Suiza bajo su influencia, a través del Consistorio de Ginebra, el cual establecía la disciplina eclesiástica de la iglesia reformada protestante de la época. Juan Calvino influyó en la quema a fuego lento del doctor y teólogo Michael Servetus. Lo quemaron vivo por rechazar la doctrina de la trinidad. Toda la violencia desde Juan El Bautista hasta el día de hoy la hicieron hombres violentos usando como excusa de que están trayendo el Reino de Los Cielos a la Tierra. Hombres imponiendo sus criterios a la fuerza. Reclamando tener derecho y autoridad delegada directamente de Dios. Por ejemplo, hoy la iglesia católica romana insiste que el Papa es el vicario de Dios sobre la tierra. Pero el papa no es el único. Hoy en día hay más vicarios en la tierra. En la iglesia protestante carismática ahora hay otros hombres y mujeres que se autodenominan apóstoles y profetas de Dios, a quienes hay que servir y rendir homenaje en sujeción ciega. Esto es un evangelio anatema, maldito. Haciéndole violencia al Reino, atacando la pureza de la palabra de Dios. Adulterando el Evangelio de la Gracia y mezclándolo con el sistema de la Ley Mosaica. Lo único que todavía no han hecho es matar y perseguir a los que los resistan, pero ciertamente lo harán, pues el espíritu del anticristo reside en todos ellos. Esto lo anticipó y profetizó Nuestro Señor Jesús. Porque así está escrito en Mateo 10:16-22; 16 He aquí, yo os envío como a ovejas en medio de lobos; sed, pues, prudentes como serpientes, y sencillos como palomas. 17 Y guardaos de los hombres, porque os entregarán a los concilios, y en sus sinagogas os azotarán; 18 y aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles. 19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis; porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar. 20 Porque no sois vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros. 21 El hermano entregará a la muerte al hermano, y el padre al hijo; y los hijos se levantarán contra los padres, y los harán morir. 22 Y seréis aborrecidos de todos por causa de mi nombre; más el que persevere hasta el fin, éste será salvo. Esta maldad en contra del Reino de los Cielos irá en aumento según se acerca el final, la tribulación y el regreso glorioso de Nuestro Señor Jesús en los aires. Ahora bien, reconociendo la historia de la iglesia, entremos de lleno al mensaje de hoy. Mi introducción tiene el propósito de llevarte a las siguientes preguntas: Y Dios, ¿porque permite toda esta maldad? ¿Acaso Dios no está en control de todo lo que pasa? También le pregunto a aquellos que están en las iglesias lo siguiente: Si la iglesia es el reino de Dios en la tierra, ¿Por qué se mueren los cristianos miembros de las iglesias todos los días sin que sean sanados milagrosamente? ¿Dónde está Dios, que a mí me abandonaron cuando niño y le pedí, le implore a EL que interviniera en mi situación y nunca me ayudo? Estoy seguro que tú tienes preguntas que nadie en la iglesia te ha contestado satisfactoriamente. Es decir, que te contesten y El Espíritu Santo te confirme que es verdad, y en acuerdo con lo que está escrito en la palabra de Dios. Muchos han leído y buscado en todas las religiones del mundo, las orientales y las occidentales, y ninguna te parece que esté contestando estas preguntas. Para ti la religión es un abstracto donde te pintan a Dios de mil maneras, y ninguna te hace sentido. Prefieres leer y ver películas de ciencia ficción acerca de un mundo perfecto, o casi perfecto, donde el bien prevalece contra el mal. Eso hace más sentido que el evangelio que te presentan por televisión y el internet. El evangelio de bendición a cambio de dinero. Estás buscando la verdad dondequiera que esté. Yo también estoy buscando la verdad. La encontré en la Palabra de Dios. Regálame uno minutos de tu tiempo y termina de leer este mensaje. ¿Qué tienes que perder? Te explicaré lo que encontré a lo largo de mi caminar en La FE. Comenzaré diciéndote que estoy de acuerdo contigo, todas las religiones han mentido. Algunas más que otras, unas con toda la intención y otras hablan y predican de un Dios a quien no conocen. Te presentan medias verdades y teologías basadas en errores de interpretación. Han hecho una mezcla confusa de reglas, dogmas, doctrinas y herejías que esconden la verdad y pureza del evangelio de Cristo. Y hay personas que dedican toda su vida a aprender y enseñar esta confusión elaborada. Doctores en divinidad, Teólogos, Maestros, en fin, desarrollan una teología sofisticada con respuestas complicadas para todo. En realidad, han construido una casa de cartas de juego, que está destinada a colapsar. Te preguntas, ¿A quién debo atender?, ¿Quién me puede enseñar la verdad? ¿Entonces, como se puede entender la vida?, ¿Qué hago yo aquí? ¿Por qué me han sucedido tantas cosas malas, si yo no pedí nacer? Te dices a ti mismo que tú no tienes culpa en este revolú. Mi contestación a todo esto es la siguiente; vivimos en Un Mundo Caído. La expresión en el idioma inglés es “A Fallen World”. Usaré una analogía para explicar la expresión “Un Mundo Caído”. Supongamos que un día te llama tu médico de cabecera para darte a conocer los resultados de tu último examen del corazón y te da la noticia que todos temen; tienes una condición cardíaca severa y te queda poco de vida. El discute tu historial médico y te pregunta si en tu familia hay historial de problemas cardiovasculares. Tú le respondes que sí, que todos los varones han padecido del corazón después de cierta edad, algunos han fallecido siendo jóvenes. Él te explica que tienes una condición hereditaria. Que tu corazón heredó la condición de tus antepasados. Que es algo inevitable, que no puedes evitar ni corregir. Tú te cuestionas si el estilo de vida que has llevado a lo largo de los años tuvo algo que ver con la condición. Pero llegas a la conclusión de que nada de como has llevado tu vida ha sido la causa del problema cardíaco. No puedes hacer nada. Ni hiciste algo para adquirir la condición, ni puedes hacer nada para eliminar la condición.En esta analogía tu heredas una enfermedad mortal. Vas a morir pronto. No hiciste nada para tener esta enfermedad y no puedes hacer nada para curarte de la misma. Tu eres inocente, no le has hecho daño a nadie.Cuando te encuentres en una encrucijada de muerte inesperada , de un mal repentino como el de la historia de Job, es en ese momento que tu mente acelera descontroladamente buscando una explicación lógica a tu mala suerte. Pues según reflexionas y das una mirada a toda tu vida, no has hecho nada malo. Has cuidado de tus padres en todo, has provisto en todas las situaciones sin falta a quien lo ha necesitado. Has jugado el juego de la vida sin hacerle daño a nadie. Has obedecido las reglas y has tenido Fe en Dios. Si piensas así, no has entendido del todo la palabra de Dios, y posiblemente no es tu culpa pues ese razonamiento de dar algo para recibir algo esta entretejido en la doctrina que se enseña en todas la iglesias hoy en día. Te han enseñando que tienes que pagar el precio de tu salvación. Que si haces todo de acuerdo a la ley y eres obediente, nada malo te va a pasar pues es a través de la obediencia que recibes bendición de Dios. Que tus buenas obras y tus diezmos te abren las puertas de bendición en el reino de los cielos. Sin embargo la palabra de Dios nos dice lo siguiente en Romanos 3:9-12; 9 ¿Qué, pues? ¿Somos nosotros mejores que ellos? En ninguna manera; pues ya hemos acusado a judíos y a gentiles, que todos están bajo pecado. 10 Como está escrito: No hay justo, ni aun uno; 11 No hay quien entienda, No hay quien busque a Dios. 12 Todos se desviaron, a una se hicieron inútiles; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. Antes bajo el viejo pacto, el judío observaba la Ley Mosaica. Sus buenas obras y su obediencia a la ley mosaica le ganaban bendición y favor de Dios. En este pasaje Pablo habla específicamente de los Judíos, quienes iniciaron bajo Moisés y la Ley Mosaica su caminar en obediencia. Pero uno a uno se desviaron, pues no hay quien haga lo bueno bajo la ley y las buenas obras. Pues la obediencia a la Ley no salva al que trata de cumplirla, sino que le cubre temporalmente de su pecado. La Ley expone el pecado de quien la observa. Por lo cual Pablo dice “No hay justo, ni aun uno” Solo hay un justo, ¡Jesús! ¡Pero ahora, BUT NOW! Bajo el Nuevo pacto EN JESUS, se nos ha imputado su justicia, sus obras y su Fe. Por lo cual, cuando aceptamos y creemos EN EL, somos salvos, pues EL PAGO EL PRECIO al derramar su sangre en La Cruz. No se trata de lo que nosotros podemos hacer para salvarnos, sino de lo que EL HIZO para salvarnos a todos los que CREAN EN EL. No hicimos nada para recibir la salvación ni podemos hacer nada para perderla. Es un Don de Dios, un regalo inmerecido. Por Fe y nada más. Por lo cual si tenemos una enfermedad de muerte, y nos han caído todas las calamidades imaginables, no significa que hemos hecho algo que desagrada a Dios. Mira el ejemplo de Job, porque así está escrito en Job 1:13-22; 13 Y un día aconteció que sus hijos e hijas comían y bebían vino en casa de su hermano el primogénito, 14 y vino un mensajero a Job, y le dijo: Estaban arando los bueyes, y las asnas paciendo cerca de ellos, 15 y acometieron los sabeos y los tomaron, y mataron a los criados a filo de espada; solamente escapé yo para darte la noticia. 16 Aún estaba este hablando, cuando vino otro que dijo: Fuego de Dios cayó del cielo, que quemó las ovejas y a los pastores, y los consumió; solamente escapé yo para darte la noticia. 17 Todavía estaba este hablando, y vino otro que dijo: Los caldeos hicieron tres escuadrones, y arremetieron contra los camellos y se los llevaron, y mataron a los criados a filo de espada; y solamente escapé yo para darte la noticia. 18 Entre tanto que este hablaba, vino otro que dijo: Tus hijos y tus hijas estaban comiendo y bebiendo vino en casa de su hermano el primogénito; 19 y un gran viento vino del lado del desierto y azotó las cuatro esquinas de la casa, la cual cayó sobre los jóvenes, y murieron; y solamente escapé yo para darte la noticia. 20 Entonces Job se levantó, y rasgó su manto, y rasuró su cabeza, y se postró en tierra y adoró, 21 y dijo: Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volveré allá. Jehová dio, y Jehová quitó; sea el nombre de Jehová bendito. 22 En todo esto no pecó Job, ni atribuyó a Dios despropósito alguno. Job bendijo a Jehová, no pecó Job en todo lo que sucedió. Sencillamente Dios es soberano y el da y el quita. ¡Amén y Amén! Lo que si sabemos es que estas cosas que suceden muchas veces son ataques satánicos en contra nuestra. El león que ronda buscando a quien tragarse completo. Entonces la palabra de Dios nos da la respuesta cuando nos suceda esto; Porque así está escrito en Efesios 6:10-20 10 Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza. 11 Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. 12 Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. 13 Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes. 14 Estad, pues, firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad, y vestidos con la coraza de justicia, 15 y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz. 16 Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno. 17 Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios; 18 orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos; 19 y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio, 20 por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de él, como debo hablar. Ahora te repito lo que pensaste anteriormente, cuando te dices a ti mismo que tú no tienes culpa en este revolú. Esto que te acabo de describir es nuestra posición en la vida. Al momento de nacer heredamos una deuda que el primer ser humano sobre la tierra se hecho encima. El primer hombre se llamó Adán. Al principio vivió sin pecado, era la creación que representaba la obra más sublime de Dios, un ser a su imagen y semejanza. Adán brillaba, su cuerpo emitía luz, pues reflejaba la gloria de Dios. Dios lo colocó en un sitio perfecto, y le dio domino sobre todas las cosas, excepto una, que no tomara del árbol de la vida. Adán desobedeció a Dios y dejó de ser perfecto, su desobediencia, su pecado fue una transgresión a la palabra de Dios. Y esa condición de pecado la pasó a su simiente, a sus hijos e hijas, hasta el día de hoy, a ti y a mí. Así que todo nacido de mujer hereda la deuda del pecado de Adán. Hay algo que debo explicar sobre la desobediencia y sus consecuencias. Dios es un Dios de Ley y Orden, Porque así está escrito en Isaías 45:12; 12 Yo hice la tierra, y creé sobre ella al hombre. Yo, mis manos, extendieron los cielos, y a todo su ejército mandé. Todo lo que existe, toda la creación es gobernada por un sistema de reglas y ordenanzas. Porque así está escrito en Eclesiastés 3:17; Y dije yo en mi corazón: Al justo y al impío juzgará Dios; porque allí hay un tiempo para todo lo que se quiere y para todo lo que se hace. Porque así está escrito en Mateo 10:29-31; 29 ¿No se venden dos pajarillos por un cuarto? Con todo, ni uno de ellos cae a tierra sin vuestro Padre. 30 Pues aun vuestros cabellos están todos contados. 31 Así que, no temáis; más valéis vosotros que muchos pajarillos. Hay un orden en la creación de Dios y él está en control. Por ejemplo, a un nuevo recluta en el ejército le dan un manual de reglas. En ese manual está como debe proceder en todas las posibles situaciones que podría enfrentar y cuál es la conducta que se requiere de él. Le enseñan la cadena de mando, desde el jefe del ejército, sus generales hasta el soldado raso, que es él. En el ejército hay una arquitectura organizacional bien establecida. Funciona como un reloj de precisión. Pues la vida cada soldado raso depende de que todos, desde los generales hasta los soldados de fila en el frente de batalla conozcan la reglas de cómo proceder en todo tipo de situación. Que la vida del soldado depende del soldado que está a su izquierda y a su derecha. En la biblia hay un verso que lo explica bien, es cuando Dios le pregunta a Caín acerca de su hermano Abel. Porque así está escrito en Genesis 4:9; 9 Y Jehová dijo a Caín: ¿Dónde está Abel tu hermano? Y él respondió: No sé. ¿Soy yo acaso guarda de mi hermano? Lo que Caín contestó en forma de pregunta es la causa raíz del caos en la humanidad, desde el tiempo de Adán hasta el día de hoy. Cada cual es guarda de su hermano. We are our brother’s keeper. (Genesis 4:9) Nuestro Señor Jesús es nuestro hermano mayor. Él nos guarda y le responde al Padre Eterno por cada uno de nosotros. Porque así está escrito en Hebreos 2:11-12; 11: Porque el que santifica y los que son santificados, de uno son todos; por lo cual no se avergüenza de llamarlos hermanos, 12: diciendo: Anunciaré a mis hermanos tu nombre, En medio de la congregación te alabaré. Nuestro hermano mayor dio su vida por todos nosotros, él ha sido y es nuestra guarda. Si hiciéramos eso, si pudiésemos en algún grado o manera ser guardas unos de otros, no habría violencia ni sangre derramada en el mundo. Por esta razón el ejército imprime en cada mente de los jóvenes reclutas antes de ir a combate, que cada cual es guarda de su compañero, de sus hermanos en batalla. Esta amistad, esta confianza entre compañeros dura toda la vida. Te preguntaras porque te he hablado del ejército, su estructura y cadena de mando. De cómo se cuidan unos a otros. Porque El Reino de Los Cielos tiene ejércitos, huestes celestiales organizadas administrando el Cosmos, en obediencia al Dios Eterno. Toma nota de lo siguiente: Dios es un Dios de ejércitos, de Huestes Celestiales. Porque así está escrito en Nehemías 9:6; 6: Tú solo eres Jehová; tú hiciste los cielos, y los cielos de los cielos, con todo su ejército, la tierra y todo lo que está en ella, los mares y todo lo que hay en ellos; y tú vivificas todas estas cosas, y los ejércitos de los cielos te adoran. Te digo todo esto, pues quiero enfatizar que existe una Ley de Dios bajo la cual toda la creación se rige. Toda la creación, todos los universos, galaxias, dimensiones, todo el infinito obedece la Ley De Dios, de manera organizada, en escalones y jerarquías y separados por dominios y potestades. Pero en este mundo que vivimos, el primer hombre desobedeció al creador e incurrió en una deuda legal. Bajo el sistema legal de la Ley de Dios, toda deuda Dios la va a cobrar. Su justicia será satisfecha. Pues EL Es Righteous, no le quita nada a nadie, y nadie le quita nada a él. Lo que el promete lo cumple, pues Dios NO MIENTE. Y el que viola la Ley, entra en una deuda que tiene que pagar. Es una transacción legal, dentro del sistema de Ley de Dios. Y como somos seres carnales e imperfectos, nuestra moral es decadente. Cometemos los mismos errores una y otra vez. ¿Sabías que ante la ley del estado eres responsable de la misma, aunque desconozcas de la Ley? Así también somos todos responsables ante la Ley de Dios, aunque no la conozcas. Eso en síntesis es lo que dice el apóstol Pablo en Romanos 3:10-12; 10 Porque así está escrito: 10: No hay un solo justo, ni siquiera uno; 11: no hay nadie que entienda, nadie que busque a Dios. 12: Todos se han descarriado; juntos se han corrompido. No hay nadie que haga lo bueno; ¡no hay uno solo! El mundo en que vives es un sistema corrompido que está en guerra contra Dios. El mundo está bajo el dominio de satanás. Por un tiempo. Porque así está escrito en Juan 12:31; 31 Ahora es el juicio de este mundo; ahora el príncipe de este mundo será echado fuera. Es un sistema lleno de violencia, mentira, enfermedad, guerra, odio, vanidad, idolatría, brujería, satanismo, bestialidad, carnalidad aberrante y muerte. Es un mundo caído de la presencia del Dios Eterno. Y en este sistema estamos todos conviviendo. Algunos en abundancia y la gran mayoría en pobreza y esclavitud. Nuestros padres, papa y mama, al igual que tú y yo, han tenido que aprender a sobrevivir en este sistema de reglas injustas y opresivas. Somos seducidos por las imágenes de sensualidad, abundancia y auto gratificación que nos transmiten por la TV 24 horas y siete días a la semana. Debido a este mundo lleno de maldad algunos enloquecen, o entran en depresión y adición a sustancias. No lo pueden procesar. En algún momento de sus vidas fueron traicionados por sus padres, abandonados, ultrajados por un amigo(a), robados de todo lo que tenían y después rechazados y penalizados siendo inocentes de todo. Otros fueron a la guerra y vivieron atrocidades inimaginables contra seres humanos. Sus mentes han sido atrofiadas, sus familias despojadas del buen ser humano que antes era. Esto es lo que significa “Un Mundo Caído, A Fallen World”. La historia también da testimonio de las atrocidades contra la humanidad que la llamada “Iglesia” ha cometido a través de los siglos. Desde el primer siglo ocurrieron persecuciones de unos contra otros entre judíos, cristianos y musulmanes. Los progrones, la santa inquisición, los templares, los jesuitas en la conquista de América, los ingleses, los franceses, los españoles, el genocidio contra los indios americanos para convertirlos al cristianismo, y muchos más. Se han matado unos a otros en el nombre de Dios. Cada cual pensando que estaba haciendo la obra que Dios le había encomendado. Es una locura, es la condición de pecado en cada uno de nosotros. It is A Fallen World. Pero… BUT NOW El mundo que Dios creó al principio no tenía pecado, no había corrupción, no había muerte, enfermedad guerras, violencia, hambre. Era un mundo perfecto. Dios tiene un plan para cada uno de nosotros. Somos su propiedad y nadie nos puede arrebatar de su mano. El Padre Santo y Bueno nos proveyó una salida a todo este sistema infernal del mundo. El proveyó una manera de pagar la deuda en que Adam nos metió. Se llama Jesús. Él se ofreció a sí mismo en sustitución nuestra, como pago de la deuda. Acuérdate que todo ocurre dentro del marco legal de la Ley de Dios. Por eso el lenguaje que se usa en la Biblia es un lenguaje legal. Incluye los términos transgresión, juicio, abogado defensor, acusado, castigo, testigos, pactos, testamento, redención, justificación, restitución y liberación. Ahora visualiza lo siguiente, estamos en una sala en la corte de Dios, y se está llevando a cabo un juicio. Tú estás sentado en la silla del acusado. Entonces nuestro Señor Jesús entra a la sala celestial donde el abogado fiscal nos acusa de trasgredir la ley de Dios. Nuestro abogado defensor (Jesús) presenta una moción ante el juez supremo. Consta de lo siguiente; yo (Jesús) me declaró culpable de todos los cargos en contra del acusado (tú y yo). Asumo (Jesús) el máximo castigo que dicta la Ley y me entrego ante la corte para recibir la sentencia máxima, la más severa. El Juez considera la moción y dicta sentencia y veredicto. Ordena al alguacil (en términos bíblicos fueron los romanos los que ejecutaron el veredicto contra Jesús) que ejecute la sentencia y entonces crucifican a Nuestro Señor Jesús. Cuando Nuestro Señor Jesús exhala su último aliento de vida en la cruz, clama en alta voz “TODO HA SIDO RESTITUIDO” (It is finished). Esto es un término judicial, el acusado ha cumplido su sentencia. Y Nuestro Señor Jesús exclama ante toda la corte celestial que ha cumplido con todos los términos del veredicto. Que ha vencido al maligno en todo y ahora entrega su espíritu y muere. Entonces resucita al tercer día y es por esta razón, por esta manifestación milagrosa del poder de Dios, que nosotros cuando creemos EN EL, podemos descansar confiados que seremos resucitados también cuando EL regrese glorioso en las nubes. Cuando Nuestro Señor Jesús resucitó, el ascendió al trono de la gracia. El Padre lo sentó a su diestra. En el lugar de honor y autoridad. Jesús se presentó ante el Juez Supremo en la corte celestial y le fue otorgado dominio sobre todas las cosas, sobre la muerte y la vida. Porque así está escrito en Apocalipsis 1:17-18; (DHH 1996) 17 Al verlo, caí a sus pies como muerto. Pero él, poniendo su mano derecha sobre mí, me dijo: "No tengas miedo; yo soy el primero y el último, 18 y el que vive. Estuve muerto, pero ahora vivo para siempre. Yo tengo las llaves del reino de la muerte. Jesús tiene las llaves del reino de la muerte. El Padre Eterno, El Juez Supremo le otorgó el poder y la autoridad para matar al impío y dar vida a los que crean EN EL. Por eso volveremos a la vida, porque EL VOLVIO A LA VIDA. Seremos resucitados porque EL nos quitó la maldición de la muerte. Nuestra deuda quedó salda, completamente y para siempre. Nuestro expediente criminal ha sido borrado, ahora tenemos un récord limpio, como el de Nuestro Señor Jesús. Se nos ha imputado su justicia sin haberla merecido. Y Jesús hizo más, EL sobrepago en exceso la deuda, para que no se quede nadie sin su redención. Jesús pagó con algo que sobrepasaba en valor y cuantía la deuda del pecado. ¿Sabías que la cosa más preciada en la creación del hombre es la sangre? Porque así está escrito en Levítico 17:4; 14 porque la sangre es la vida de todo ser viviente. Por eso les he dicho que no coman sangre, porque ella es la vida de todo ser viviente, y cualquiera que la coma será eliminado. La Vida de todo ser viviente está en la sangre. Cuando Jesús ofreció su propia sangre, el ofreció lo más preciado en toda la creación, La Fuerza de Vida que sostiene toda criatura. La Vida está EN EL. Nuestro Señor Jesús TIENE VIDA EN SI MISMO. A diferencia de nosotros que nuestra vida viene DE EL y al nosotros morir, nuestra vida regresará A EL. Por eso Jesús puede resucitar muertos, pues él es el dador de la vida. La Vida reside EN EL. Por lo cual, cuando Nuestro Señor Jesús derramó su sangre bendita en La Cruz, lo que él estaba haciendo literalmente era revivir, resucitar de la muerte a la vida A TODO AQUEL QUE CREA EN EL. ¡Tal es el poder de La Sangre de Cristo! Aleluya y Amén. Porque así está escrito en: 1 Corintios 15:21-22 21 así como por causa de un hombre vino la muerte, también por causa de un hombre viene la resurrección de los muertos. 22 y así como en Adán todos mueren, así también en Cristo todos tendrán vida. Y en Colosenses 3:1-3; 1 Por lo tanto, y a que ustedes han sido resucitados con Cristo, busquen las cosas del cielo, donde Cristo está sentado a la derecha de Dios. 2 Piensen en las cosas del cielo, no en las de la tierra. 3 Pues ustedes murieron, y Dios les tiene reservado el vivir con Cristo. 4 Cristo mismo es la vida de ustedes. Cuando él aparezca, ustedes también aparecerán con él llenos de gloria. Y en Hebreos 9:12; 12 Con su propia sangre—no con la sangre de cabras ni de becerros—entró en el Lugar Santísimo una sola vez y para siempre, y aseguró nuestra redención eterna. Nosotros tenemos vida EN EL, pues fuimos rescatados de la muerte y de la Ira venidera por medio del pago por nuestro castigo. Y el pago fue hecho con la bendita sangre de Nuestro Señor Jesús. Hay un coro pentecostal que dice” Hay poder, poder, sin igual poder en la sangre que EL vertió…” Cuan ciertas son estas palabras, que poderosa es la sangre de Jesús. Era el único método de pago que podía cumplir y exceder la cuantía de la deuda por nuestros pecados. Su sangre cubre y redime de pecado hasta el último pecador que viva sobre la tierra antes del regreso de Jesús en las nubes. Cuando la Biblia dice que cubrió y redimió de pecado, es mucho más que una acción de perdonar. Es la acción DE REVIVIR DE LOS MUERTOS. La Sangre de Jesus nos ha resucitado A LA VIDA En EL. La sangre de Jesús excedió y sobrepasó cualquier acusación futura, no tan solo las pasadas, y las presentes, sino que ya cubrió cualquier acusación futura en nuestra contra, hasta el mismo momento de nuestra muerte. Esto fue una transacción judicial efectuada dentro de una sala en sesión, de un fiscal y el abogado defensor (Jesús es nuestro abogado de defensa) de frente al estrado del Juez. El juez supremo aceptó la moción, pues satisfacía su justicia. Fue una moción judicial que cumplía y satisfacía la Ley de Dios sobre el pecado y la expiación. Dios exige el cumplimiento de cada tilde de la Ley. Exige el pago total de una deuda de pecado. Él es recto y su ley es perfecta. La Ley de Dios dice que no hay remisión de pecados sin derramamiento de sangre. Porque así está escrito en Hebreos 9:22; 22 De hecho, según la ley de Moisés, casi todo se purificaba con sangre porque sin derramamiento de sangre no hay perdón. Por esta razón, según el sistema de expiación de pecados en la Ley Mosaica, Jesús derramó su sangre por todos nosotros.Nuestro señor Jesús pagó la deuda con la cual nacimos, nos sustituyó en el madero, se dejó crucificar para derramar su sangre de acuerdo a La Ley Mosaica. Solo así se podía satisfacer La Justicia de Dios. Solo asi nuestros pecados fueron borrados. He aquí el simbolismo de Jesús como el cordero de sacrificio. El cordero perfecto, sin falta, sin mancha. Cuya sangre derramada era perfecta, sin contaminar pues no era la sangre de Adán y Eva. Nuestros pecados, los de ayer, los de hoy y los de mañana han sido perdonados de una vez y para siempre. Las últimas palabras de Nuestro Señor Jesús en la Cruz fueron “Consumado Es” (Juan 19:30) La palabra en el manuscrito original es la palabra raíz griega τελέω Telos o Telestai, con el número Strongs g5055 y g5056. En Juan 19:30 donde en el manuscrito escrito en griego koines lee “Telestai”, realmente es una traducción de una palabra en el idioma hebreo. Te hago esta aclaración, pues cuando Jesús exhaló su último aliento y dijo “Consumado es”, lo habló en el idioma hebreo. Jesús no habló en el idioma griego la palabra “Telestai”. Jesús habló en el idioma hebreo de los judíos líderes fariseos del templo que presenciaron su crucifixión. Por lo que debemos aplicar el contexto hebreo de la palabra que hablo Jesús para poder entender el sentido correcto de las palabras de Jesús. Cuando se busca la palabra más cercana a Telestai en el idioma hebreo, surge la palabra N’Shalam שָׁלַם con el número Strongs 0799. Uno de sus significados dentro del contexto hebreo es: “Todo ha sido restituido”, Hay Paz entre Dios y El Hombre. (N’Shalam) Cuando Nuestro Señor Jesús exclamó con su último aliento de vida “consumado es”, se realizó ante el registrador de la corte celestial el pago perfecto por nuestra deuda. Nos restituyó al dueño original. Somos propiedad del Padre Eterno y Jesús nuestro hermano mayor vino al mundo y pagó el precio de nuestro rescate. Al igual que José en Egipto, el rescató a sus hermanos y los salvó. Jesús nos redimió del castigo de muerte, y ahora el trabajo de nosotros ES CREER en este acto y sacrificio de amor que Jesús hizo por ti y por mí, por toda la humanidad. Lo único que Dios exige de ti de mi es CREER EN EL. Creer lo que nos dice el Apóstol Pablo en 1 Corintios 15:3-9; Porque así está escrito; 3 Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras; 4 y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras; 5 y que apareció a Cefas, y después a los doce. 6 Después apareció a más de quinientos hermanos a la vez, de los cuales muchos viven aún, y otros ya duermen. 7 Después apareció a Jacobo; después a todos los apóstoles; 8 y al último de todos, como a un abortivo, me apareció a mí. 9 Porque yo soy el más pequeño de los apóstoles, que no soy digno de ser llamado apóstol, porque perseguí a la iglesia de Dios. Contrario a lo que la mayoría de las Iglesias hoy en día predican, tú eres salvo por medio de LA FE EN EL. Fe y Nada más. Significa creer en la resurrección de la muerte de Jesús, hace dos mil años. Significa aceptar lo que dice la palabra de Dios. Creer que Cristo murió literalmente, y fue enterrado y que tal como dice la Biblia, Jesús resucitó al tercer día conforme a las escrituras. Significa creer que tú también serás resucitado de la muerte el día del regreso de Nuestro Señor Jesús en lo aires. Y lo más difícil, aunque no lo parezca, es CREER QUE HAS SIDO PERDONADO. Creer que tu salvación es un regalo inmerecido, que por gracia has sido salvo. No hiciste nada para ganarte la salvación y no puedes hacer nada para perder la salvación. Pues ya fue hecho el pago perfecto por todos tus pecados. Los pasados, los presentes y los futuros. Lo que el Padre Eterno nos requiere es creer. SOLO CREER. Aquí pido en oración al Padre Santo y Bueno que te envié su espíritu santo y te llené de su poder. Para que de te entendimiento sobre esto que estas leyendo, y te lleve de la mano en este nuevo caminar en medio de un mundo caído. Para que fortalezca TU FE. Para que ponga ángeles en tu camino que te protejan del mal a tu alrededor. Para que puedas crecer y madurar en el conocimiento de la verdad, en el conocimiento de la voluntad del Padre Eterno y puedas caminar confiado en tu vida, en Paz, Gozo y Fe. Esto lo pido en el nombre de Jesús, ¡AMEN! Has sido perdonado y eres bien amado del señor Jesús. El dio su vida por ti. Ahora regresemos al principio del mensaje, con las preguntas que comenzamos: 1. Y Dios, ¿porque permite toda esta maldad? 2. ¿Acaso Dios no está en control de todo lo que pasa? 3. También les pregunto a aquellos que están en las iglesias lo siguiente: Si la iglesia es el reino de Dios en la tierra, ¿Por qué se mueren los cristianos todos los días sin que sean sanados milagrosamente? 4. ¿Dónde está Dios, pues a mí me abandonaron cuando niño y le pedí, le implore a EL que interviniera en mi situación y nunca me ayudo? La contestación para las preguntas 1 y 2 no es agradable, este mundo y sus sistemas están bajo el dominio de satanás. Cuando Adán pecó, le cedió el dominio al adversario, al acusador. Te preguntas como esto es posible, ¿acaso Dios no puede hacer nada? Esta situación es por un tiempo, hasta que regrese Nuestro Señor Jesús en los aires. Entonces satanás será arrojado al abismo donde será encadenado por mil años. Acuérdate que todo ha sucedido en un marco legal. Lee el primer capítulo del libro de Job. Te explico a continuación. La historia de Job trata de un hombre justo, lo cual es reconocido por Dios al principio del relato. Sin mancha. Obediente y temeroso de Dios. Job existió. Su historia es verdadera. Un día satanás se presenta en “La Corte Celestial”, la asamblea de Dios en los cielos. Entonces en presencia de todos los ángeles y los ejércitos celestiales, llama al Dios Eterno un oportunista y mentiroso. Pues le dice que Job no ama a Dios, sino que le obedece por conveniencia. Pues Dios ha bendecido a Job de sobremanera, y lo ha protegido de todo mal. El argumento de satanás es que el hombre que Dios creó, no le ama verdaderamente. Sino que Dios manipula el entorno favoreciéndole para ganar su lealtad y adoración. Entonces el Juez de la Corte, Que es Dios Todopoderoso, establece una manera de probar el argumento de satanás, de una vez y para siempre. Le da permiso a satanás de hacerle mal a Job, el justo, el inocente. Tome nota que satanás es una creación de Dios, sujeto a Dios, y tiene que pedir permiso antes de hacerle nada a Job. El adversario NO ES IGUAL A DIOS. Cuando el adversario reta a Dios en la corte celestial, todos los ángeles observan las cosas terribles que el adversario le hace. La pérdida de todo lo que tiene, su salud, sus hijos, su paz. Y en todo esto JOB NO PECO. Porque así está escrito en Job1:20-22; 20, Entonces Job de levantó, y rasgó su manto, y rasuró. y se postró en tierra y adoró, 21 y dijo: Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volveré allá. Jehová dio, Jehová quitó; sea el nombre de Jehová bendito. 22 En todo esto no pecó Job, ni atribuyó a Dios despropósito alguno. La acusación de satanás fue derrotada, y Job fue restituido, sanado de todo mal. La historia de Job nos advierte que el mundo y su sistema de maldad es el resultado de la administración de satanás. Quien todavía es el príncipe de este mundo. Él es el león rugiente que vela por atacarnos y quitarnos la salud y nuestra paz con Dios. Porque así está escrito en 1 Pedro 5:6-11; 6 Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo; 7 echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros. 8 Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; 9 al cual resistid firmes en la fe, sabiendo que los mismos padecimientos se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo. 10 Mas el Dios de toda gracia, que nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca. 11 A él sea la gloria y el imperio por los siglos de los siglos. Amén. Tú y yo seguimos padeciendo enfermedades y aflicciones en este mundo pues esa es la condición de nuestro cuerpo carnal. Es un cuerpo imperfecto, corrompido por pecado y destinado a morir. Estos padecimientos obran en cada uno de nosotros perfección y fortalecen nuestra Fe. Nos establecen firmes en Cristo. Y esto es difícil de aceptar para los que buscan un evangelio de victoria, salud perfecta y dinero. El Apóstol Pablo nos exhortó una y otra vez a caminar y vivir por medio de LA FE y nada más. El Apóstol Pablo fue todavía más allá y nos mandó a estar gozosos siempre, aún en medio de la aflicción. ¡Qué cosa más difícil ésta, y que grande e inexplorable es la sabiduría del Padre Bueno y Santo! Nuestro Señor Jesús nos mandó a que pongamos nuestra ansiedad sobre EL. Algunos nos tardamos toda una vida en aprender a confiar y esperar EN EL. Pero cuando aprendemos a confiar EN EL entonces entramos en su descanso. Empezamos a vivir plenamente confiados y seguros no importa lo que el enemigo nos ponga en el camino. Dios no nos prometió sanarnos en este cuerpo presente si le adoramos. Lo que Dios nos ha prometido es La Vida Eterna, EN CRISTO. Si permanecemos fieles a su palabra hasta el final. Esta es la contestación a la pregunta número 3. Usted y yo estamos viviendo en una jungla donde impera la ley del más fuerte que se come al más pequeño. Estamos viviendo en este mundo corrompido, pero no somos de este mundo. No estamos solos, no estamos desamparados. Porque así está escrito en 2 Corintios 4:7-18; 7 Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros, 8 que estamos atribulados en todo, mas no angustiados; en apuros, mas no desesperados; 9 perseguidos, mas no desamparados; derribados, pero no destruidos; 10 llevando en el cuerpo siempre por todas partes la muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestros cuerpos. 11 Porque nosotros que vivimos, siempre estamos entregados a muerte por causa de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestra carne mortal. 12 De manera que la muerte actúa en nosotros, y en vosotros la vida. 13 Pero teniendo el mismo espíritu de fe, conforme a lo que está escrito: Creí, por lo cual hablé, nosotros también creemos, por lo cual también hablamos, 14 sabiendo que el que resucitó al Señor Jesús, a nosotros también nos resucitará con Jesús, y nos presentará juntamente con vosotros. 15 Porque todas estas cosas padecemos por amor a vosotros, para que abundando la gracia por medio de muchos, la acción de gracias sobreabunde para gloria de Dios. 16 Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día. 17 Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria; 18 no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas. Todo lo que te he dicho en este mensaje es la verdad del evangelio. No es un evangelio color de rosa. Es una vida con sus altas y bajas. No es una vida en búsqueda de la prosperidad material, no es una vida sin aflicciones, sino una vida sencilla, con lo que nos hace falta y nada más. Pero si crees en Jesús, de cierto que tendrás una vida llena de gozo y sanidad del alma. Entrará el Espíritu Santo de Dios en ti y podrás entender las cosas que dice la Biblia, que es el manual del ejército del que te hablé anteriormente. Y entonces vivirás bajo la cobertura del Dios Alto y Sublime, y sus ángeles te cuidarán de día y de noche. Y verás los milagros de Dios en tu vida y la de tus seres queridos. Orarás en lo secreto y el Padre Santo contestará tus peticiones, según sea su voluntad. No estás solo o sola. Él nunca te ha abandonado, sus ojos están sobre ti. Ora al padre Eterno que entre en tu vida y te muestre el camino. Pido al Dios Eterno que Nuestro Señor Jesús te sea revelado y te lleve de su mano siempre, ¡AMEN! Sea toda la Gloria y Honra para el Rey de Reyes y Señor de Señores, Cristo Jesús, Amén. Hasta aquí el estudio de hoy. Este estudio es producido y está disponible gratuitamente en la página de Internet Laraizdelolivo.com. Les invito al estudio de la Biblia como única autoridad y fuente de conocimiento de la palabra de Dios. Me pueden escribir al email: laraizdelolivo@gmail.com Escribo los estudios para que brille la verdad de las Sagradas Escrituras, el evangelio de nuestro Señor Jesús. Oro al Padre Santo que, por medio de su Espíritu Santo, nos guie y enseñé el sentido correcto de sus palabras. Las cuales, por más de mil años han sido trasladadas de idioma en idioma, por hombres santos quienes lo hicieron por amor a Nuestro Señor Jesús. Hoy nos toca a todos prepararnos diligentemente en el estudio de las Sagradas Escrituras, para poder discernir entre la verdad del Evangelio de Cristo y las fábulas y decepciones, en este tiempo del Fin. La Paz de Cristo sea con todos ustedes, y que el Espíritu Santo les guie a toda verdad, ¡Amén! ¡Shalom Aleijem!